Las inundaciones pueden ocurrir de forma repentina y causar daños significativos tanto en viviendas como en instalaciones comerciales o industriales. Ya sea por lluvias torrenciales, desbordamientos de ríos o fallos en sistemas de drenaje, la acumulación de agua puede ser rápida, incontrolable y peligrosa.
En estos casos, los primeros minutos tras una inundación son cruciales para reducir riesgos, evitar daños mayores y comenzar las tareas de achique de forma segura y eficaz. A continuación, desde Cubas Valencia, queremos proporcionarte una guía clara y práctica sobre qué hacer en esos primeros momentos críticos. Desde las primeras medidas de seguridad hasta la elección del equipo adecuado y la contratación de profesionales, cada paso cuenta.
Seguridad personal: lo primero es protegerse
Antes de pensar en achicar el agua, lo más importante es garantizar tu seguridad y la de quienes están contigo. El agua de una inundación puede estar contaminada con aguas residuales, productos químicos o materiales peligrosos, además de poder ocultar riesgos como enchufes sumergidos o suelos inestables.
Acciones inmediatas:
- Corta la electricidad desde el cuadro general si puedes hacerlo sin riesgo. Nunca toques interruptores con las manos mojadas o si estás pisando agua.
- Evita entrar en zonas inundadas sin botas impermeables de seguridad y guantes. Si el agua supera los 15-20 centímetros de altura, hay riesgo de caída, infección o contacto con corriente eléctrica.
- Ventila los espacios cerrados si hay acumulación de gases y mal olor. En garajes y sótanos, asegúrate de que no haya fugas de gas antes de acceder.
- No permitas la entrada de niños o mascotas hasta que el área esté asegurada.
Evalúa la situación y localiza el origen
Una vez confirmada la seguridad, el siguiente paso es realizar una evaluación rápida del entorno. Saber de dónde viene el agua es fundamental para tomar decisiones efectivas.
Revisa lo siguiente:
- ¿El agua proviene de lluvias, de un rebosamiento interno (como un inodoro o una fosa séptica), de un colector municipal o de una tubería rota?
- ¿El nivel de agua sigue subiendo o ha dejado de entrar?
- ¿Está afectando a equipos eléctricos, calderas, almacenes, documentos, etc.?
Esta información te servirá para decidir si puedes empezar a extraer agua tú mismo o si es necesario contactar con un equipo profesional especializado en achiques de emergencia.
Equipos para el achique: lo que necesitas (o no deberías improvisar)
El achique de agua consiste en retirar el líquido acumulado de forma rápida y segura. En algunos casos leves, puedes comenzar con medios manuales como cubos, mopas o aspiradoras de líquidos domésticas. Pero en la mayoría de los escenarios serios, esto no será suficiente.
Equipos profesionales que pueden intervenir:
- Bombas sumergibles automáticas, capaces de extraer grandes volúmenes de agua, incluso con sólidos en suspensión.
- Camiones cuba, equipados con sistemas de aspiración de alta potencia que permiten el vaciado total de sótanos, fosas, garajes y depósitos.
- Equipos electrógenos autónomos, en caso de corte de luz.
- Detectores de humedad y sensores para comprobar zonas ocultas o de difícil acceso.
Advertencia importante: no uses una aspiradora doméstica común para líquidos si no está específicamente diseñada para ello, ya que podría provocar un cortocircuito o un incendio.
Cuándo llamar a profesionales del achique
En muchas situaciones, intentar gestionar una inundación sin medios adecuados puede empeorar el problema o alargar los tiempos de recuperación. Si te encuentras ante alguno de estos casos, no lo dudes: llama a un servicio de achiques urgente, llama a Cubas Valencia.
Soluciones típicas que requieren profesionales:
- El agua supera los 20-30 centímetros y no deja de entrar.
- Hay riesgo eléctrico, químico o sanitario.
- El origen del agua es desconocido o difícil de detener.
- El espacio afectado es un sótano, garaje, nave o local comercial con materiales sensibles.
- El agua proviene de una fosa séptica, lo que implica riesgo biológico.
Contar con empresas especializadas no solo agiliza el proceso, sino que asegura el cumplimiento de protocolos sanitarios y medioambientales.
Medidas paralelas: protege bienes y evita daños mayores
Mientras se realiza el achique (ya sea por ti o por profesionales), puedes aplicar medidas de mitigación de daños para salvar objetos y minimizar el impacto.
- Desconecta y eleva aparatos eléctricos que aún no se han mojado.
- Retira alfombras, papeles, muebles que puedan absorber humedad.
- Aplica barreras físicas si sigue entrando agua por un punto concreto (sacos de arena, láminas plásticas, etc.).
- Fotografía los daños para documentar el incidente en caso de necesitar un parte para el seguro.
Después del achique: limpieza, secado y prevención del moho
Una vez que el agua ha sido extraída, no termina el trabajo. Las siguientes horas y días son esenciales para evitar consecuencias secundarias como la aparición de moho, el deterioro de materiales o la degradación de instalaciones eléctricas.
Pasos recomendados tras el achique:
- Limpieza con productos desinfectantes (preferentemente bactericidas).
- Ventilación forzada o uso de deshumidificadores.
- Revisión de instalaciones eléctricas por un técnico autorizado.
- Inspección de desagües, sifones y fosas por si ha quedado suciedad que pueda provocar futuros atascos.
- Valoración del origen de la inundación para implementar mejoras (rejillas, bombas automáticas, válvulas antirretorno, etc.).
Prevención a futuro: aprende del incidente
Una inundación puede ser un punto de inflexión para tomar conciencia sobre el estado real de nuestras infraestructuras. Tras el incidente, vale la pena realizar una evaluación técnica más profunda.
Acciones preventivas a considerar:
- Contratar una inspección con cámara de tuberías y colectores si sospechas de la presencia de obstrucciones.
- Instalar bombas de achique automáticas con alarma.
- Revisar periódicamente rejillas pluviales y canaletas.
- Asegurar que las fosas sépticas o depósitos están en buen estado y se vacían según el calendario.
- Disponer de un plan de actuación ante inundaciones, especialmente en zonas que sean proclives a ello.
Actuar rápido, actuar bien y actuar seguro. Esa es la clave cuando el agua lo invade todo. En Cubas Valencia contamos con una amplia experiencia en la realización de achiques, actuando con la rapidez y emergencia que este tipo de situaciones requiere. ¡Contáctanos!